Como ya es habitual cada año, os mostramos los datos anuales de lluvia de nuestra zona. Son datos muy localizados (La Alberca de Záncara – Cuenca), pero pensamos que el patrón de lluvias que comentaremos a continuación podría ser aplicables, sobre todo, a la zona centro de España (la zona norte y la zona sur tienen bastantes más precipitaciones a lo largo del año).
Viendo la cantidad de litros llovidos en todo el año (495mm), ¿Quién diría que fue un año desastroso de cosecha? Y es que este año ha sido el peor que nosotros hemos vivido como agricultores (recordamos los años 1995 y 2005 donde también hubo sequía), pero sin duda alguna, este año 2023 ha sido catastrófico para el campo y especialmente en la zona centro de la península. Y es cierto que la cantidad es muy superior a la del año pasado (año que ya tampoco hubo buenas cosechas en cereales y leguminosas) … y es que como venimos diciendo desde hace unos años, cada vez llueve peor. En esta ocasión no ha podido llover peor, ya que la gran cantidad de litros se concentran en los últimos días de mayo y junio, donde la cosecha ya estaba perdida y el mes de septiembre, donde no hemos comenzado con la campaña del 2023-2024.
Las lluvias de junio estropearon la poca cosecha que había, ya que el poco grano se cayó al suelo y las malas hierbas nacieron rápidamente (tuvimos que labrar las parcelas cosechadas con las gradas porque con el cultivador prácticamente era imposible). En cuanto a las lluvias intensas de septiembre, no pudieron hacer más daño en los terrenos debido a los grandes torrenciales que generaron… agua que, en vez de beneficiar, destrozó los terrenos, arrancó cultivos leñosos y se perdió sin un uso adecuado.
Si nos centramos en las lluvias por estaciones del año, vemos que en esta ocasión la primavera fue el periodo más lluvioso (195 mm) y el invierno prácticamente no registró casi precipitaciones… fue uno de los factores clave para la pérdida casi total de la cosecha.
Llevamos unos años, que para los cultivos extensivos de secano, el clima se está convirtiendo en un grave problema. Parece que el patrón anual de lluvia (grandes periodos de sequía y lluvias torrenciales), se ajusta más a los cultivos leñosos que son capaces de coger mejores reservas cuando llueve y aguantan más cuando hay sequía.